La nueva estrategia de seguridad nacional de Estados Unidos ha reavivado el debate en la comunidad cripto al omitir cualquier referencia directa a los activos digitales o la tecnología blockchain.
Publicado por la administración Trump, el documento describe las prioridades de seguridad a largo plazo y las ambiciones tecnológicas de la nación, pero su silencio sobre las criptomonedas contrasta tanto con el impulso del mercado como con las declaraciones políticas recientes.
A medida que los sistemas financieros globales integran cada vez más activos digitales, muchos observadores ven esta ausencia como una señal de incertidumbre política en un momento en que la claridad regulatoria es cada vez más importante para el crecimiento de la industria.
El precio de ETH registra pequeñas ganancias en el gráfico diario. Fuente: ETHUSD en Tradingview
¿Por qué la IA ha acaparado la atención?
A lo largo de sus 33 páginas, la estrategia sitúa la inteligencia artificial, la biotecnología y la computación cuántica en el centro de la competencia de próxima generación de Estados Unidos.
La administración afirma que la tecnología y los estándares estadounidenses deben "impulsar al mundo hacia adelante", subrayando un enfoque en la computación avanzada en lugar de las finanzas descentralizadas. Los activos digitales, que habían ganado prominencia a través de declaraciones anteriores de funcionarios, no reciben mención explícita.
Esto contrasta con los comentarios del presidente Trump en los últimos meses. En una entrevista con CBS 60 Minutes, advirtió que China no debería convertirse en la líder mundial en activos virtuales e insistió en que la minería de Bitcoin debería permanecer dentro de las fronteras de EE.UU.
Una referencia sutil, pero sin una política clara
Aunque las criptomonedas no se nombran en la estrategia, el documento sí hace referencia a fortalecer el "liderazgo estadounidense en finanzas digitales e innovación".
Los analistas ven esto como un gesto amplio en lugar de una dirección política firme, pero deja abierta la posibilidad de que los activos digitales aún puedan influir en futuras estrategias regulatorias o económicas.
Esta ambigüedad se produce a pesar de un año de acciones significativas a favor de las criptomonedas. Medidas como la Ley GENIUS para la supervisión de stablecoins, la formación de un grupo de trabajo de aplicación cripto, la reducción de las presiones regulatorias sobre los exchanges y la oposición a una moneda digital del banco central han moldeado las expectativas.
El establecimiento de una reserva nacional de Bitcoin, financiada con activos digitales incautados, señala además que las criptomonedas siguen siendo una consideración estratégica incluso si no se reconocen formalmente en el último plan.
Respuesta del mercado e implicaciones más amplias
Operando actualmente alrededor de $91,900, Bitcoin cayó brevemente por debajo de $90,000 tras la publicación de la estrategia, un movimiento agravado por las presiones macroeconómicas más amplias y la anticipación de una decisión de tasas de la Reserva Federal.
El llamado de la administración para un mayor gasto en defensa entre los aliados de la OTAN también ha planteado preguntas sobre la inflación y la política monetaria, factores que podrían influir en el apetito de los inversores por los activos digitales.
Por ahora, la omisión deja a la industria navegando en un vacío familiar: una fuerte retórica política, iniciativas de políticas dispersas, pero sin un marco integral. Mientras Estados Unidos centra sus prioridades en la IA y la computación cuántica, la posición de las criptomonedas en la estrategia nacional sigue sin definirse. ¿Es este el fin de la 'Administración Cripto'?
Imagen de portada de ChatGPT, gráfico de ETHUSD de Tradingview
